Trabajar para vivir, no vivir para trabajar

  • Robert Patterson
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A menudo escuchamos la historia de que deberíamos encontrar el trabajo que realmente disfrutamos, porque de esa manera no tendríamos que trabajar un solo día, ya que todo sería divertido.

Sabemos que algo como esto no es fácil. Para sobrevivir, muchas ocasiones obligan a las personas a trabaja con algo que va en contra de tus gustos e incluso tus valores.

Sin embargo, esto no debería ser así. Tarde o temprano, un ambiente hostil que perjudique nuestros principios eventualmente afectará nuestra salud emocional. También afectará nuestra salud física, especialmente cuando pasamos la mayor parte de nuestro día allí.

La vida es demasiado corta para conseguir el trabajo equivocado..

Por lo tanto, en la medida de lo posible, debemos realizar actividades que se ajusten a nuestros talentos. Además, deberían darnos esto satisfacción que podemos encontrar al hacer algo que nos haga sentir útiles y bien.

Te invitamos a reflexionar sobre esto..

Tiempo para trabajar y tiempo para vivir.

Si conoce la "teoría de los tres ochos", ya sabe sin lugar a dudas que la jornada laboral ideal sería de 8 horas. De esa manera tendríamos 8 horas de ocio y 8 horas para descansar o dormir..

También sabemos que esta proporción no siempre se cumple. Después de todo, está el tiempo extra y el tiempo que pasamos en desplazamientos o en días de trabajo interrumpidos. Este tiempo extra a veces nos hace perder horas preciosas.

Los especialistas en psicología del trabajo a menudo distinguen 3 tipos de perfiles cuando se enfrentan al trabajo y los contextos complejos que los rodean. Sería de la siguiente manera.

  1. Los que odian tu trabajo

En esta primera dimensión están aquellas personas que, en cualquier circunstancia, han llegado al punto de odiar su trabajo..

Esto puede ocurrir cuando aparecen factores como una mala gestión que no valora a los empleados y los "explota" o, a veces, incluso en ciertos entornos donde la competitividad o la presión de ciertos colegas nos hace trabajar con disgusto, estrés o cierta incomodidad..

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  1. Los que hacen lo que hacen

Esta parte es, sin duda, la gran mayoría de la población.. Trabajar es, después de todo, una necesidad y una obligación. Así que tratamos de hacerlo lo mejor que podemos..

Sin embargo, caemos en una cierta resignación donde uno nunca deja de soñar con una vida mejor o un premio de lotería..

Sin molestias incisivas y casi destructivas como en el caso anterior, debido a la rutina o incluso a la falta de motivación., las personas están perdiendo su energía vital.

Poco a poco caemos en la deriva de la apatía y la rutina asfixiante donde el estrés y la ansiedad pueden surgir porque no hay satisfacción personal. Porque hay una disonancia interna.

El empleo es, al final, un negocio, no algo que nos define y nos hace sentir útiles u orgullosos de nosotros mismos. Aunque existen muchas diferencias individuales, muchas personas pueden terminar con depresión por estas causas..

  1. Los que aman lo que hacen

En este grupo están aquellos que han encontrado un propósito vital que los define e identifica. Para ellos, trabajar no es una obligación, sino su sentido personal..

Con su trabajo, no solo promueven su propia satisfacción, sino que también mejoran la calidad de vida de los demás..

Las personas que trabajan en lo que aman y que, sobre todo, tuvieron la suerte de encontrar una forma o contexto que valora sus habilidades, trabajo por vocación.

La palabra vocación proviene del latín y significa "un llamado que proviene de adentro para poner nuestra voz en acción". Esta dimensión es un aspecto que todos deberíamos descubrir y encontrar los medios para realizarla..

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Los conocedores, los trabajadores del futuro.

En esta sociedad en constante cambio y cada vez más compleja, ha surgido un nuevo perfil profesional tan interesante como útil. Son conocidos como knowmads y tienen las siguientes características:

  • El knowmad puede ser una persona joven o madura que sabe que él o ella tiene habilidades que pueden ser útiles para otros y quiere transmitirlas..
  • El knowmad entiende que tu trabajo debe ser tu pasión, pero lo hace independientemente, sin tener un libro de reglas o un jefe sobre sí mismo.
  • Te gustan las personas y te conectas con ellas, ya sea en persona o mediante la tecnología, donde a menudo encuentras la forma ideal de desarrollar tu trabajo..
  • El knowmad valora tu libertad, Transforma la información en conocimiento y es versátil. Aprende continuamente, está inquieto y no teme al fracaso, porque también lo considera una forma de aprendizaje..

Un enfoque interesante sobre el que escriben muchos libros y que nos enseña, ante todo, cómo buscar nuevas posibilidades laborales en un contexto complejo donde lo que quieres es, en primer lugar, trabajar para ser feliz.

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